Durante este verano hemos disfrutado de una mañana en el Real Jardin Botánico de Madrid, pegado al Museo del Prado. Nos encantaron toda la colección de arboles y plantas distintas, y sobre todo la maravillosa colección de bonsáis que tienen. Disfrutamos mucho paseando por ahí, y sentándonos a charlas a la sombra, y también tuvimos un arto para desayunar todos juntos.